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Archivo de la categoría: Nudo de piedras (2006-2012)
On The Street Where You Live
Supongo que el nombre de Jeremy Brett, así a bote pronto, a la mayoría nos diría más bien poco. En cambio si añadimos que fue el actor que captó como nadie la esencia del detective del 221B de Baker Street en las series que Granada Television produjo entre 1984 y 1994, a casi todos nos vendrá a la memoria un rostro enjuto de nariz afilada y mirada inteligente.
Veinte años antes de meterse en la piel de Sherlock Holmes, un joven Jeremy Brett fue Freddy Heinsford Hill en My fair Lady, el rico pretendiente al que Liza (Audrey Hepburn) hechizaba en las carreras de Ascot. Aquél que caía rendido a sus pies, no por la dama en que el profesor Higgins (Rex Harrison) pretendía haberla convertido sino por su verdadera personalidad, espontánea y descarada.
Aunque al parecer Jeremy Brett no cantaba nada mal, la voz que interpreta la canción en la película pertenece a Bill Sherley.
La calle donde tú vives (1964) Bill Sherley
—Buenas noches, señor.
—¿Está preparada la cena? Estoy hambriento.
—Ahora mismo, señor.
—Buenas noches, profesor Higgins.
Cuando ella mencionó
como su tía mordió la cuchara
me desarmó completamente,
y mi corazón emprendió un viaje a la luna
cuando me contó acerca de su padre
y la ginebra.
Y yo nunca había visto una cara tan encantadora
como la que puso al gritar: «¡Mueve tu gordo…!»
—¿Qué desea, señor?
—¿Se encuentra en casa la señorita Doolittle?
—¿Quién desea verla?
—Freddy Heinsford Hill. Si no me recuerda dígale que soy el tipo que se estaba “choteando” de ella.
—Sí, señor.
—¿Querría dárselas?
—¿Le gustaría entrar? Están cenando pero podría esperar en el vestíbulo.
—No. Gracias. Quiero beber en la calle donde ella vive.
A menudo he paseado
por esta calle antes,
pero la acera siempre estuvo
bajo mis pies.
De repente me encuentro a varios pisos de altura
sabiendo que estoy en la calle donde tú vives.
¿Hay árboles de lilas en el centro de la ciudad?
¿Puedes escuchar a una alondra en otra parte de la ciudad?
¿Fluye este encantamiento de cada puerta?
No, sólo sucede en la calle donde tú vives.
Y, oh, el imponente sentimiento
de saber que tú estás cerca.
El subyugante sentimiento
de que puedas aparecer en cualquier momento.
La gente se detiene y me observa,
ellos no me molestan
porque no hay otro lugar en la Tierra
en el que preferiría estar
Dejad que el tiempo corra
no me importará si
puede estar aquí, en la calle donde tú vives.
—Lo siento mucho señor. La señorita Doolittle dice que no quiere volver a ver a nadie, jamás.
—Pero, ¿por qué? Ella es increíble.
—Y así se lo he dicho señor. ¿Quiere que le haga llegar algún mensaje más?
—Dígale que esperaré.
—Pero podrían ser días, señor, incluso semanas.
—Pero, ¿es que no lo ve? Aquí seré más feliz.
La gente se detiene y me observa,
ellos no me molestan
porque no hay otro lugar en la Tierra
en el que preferiría estar
Dejad que el tiempo corra
no me importará si
puede estar aquí, en la calle donde tú vives.
La cinta VHS
A estas alturas a Enjuto Mojamuto ya le conoce hasta el Tato. Aunque el ciberfreak del gorro me encanta, siento especial predilección por esta otra creación de Joaquín Reyes. A ver si hay suerte y se animan a sacarla más a menudo en Muchachada nui, que por cacharricos de los ochenta no será: los primeros juegos electrónicos (precursores de la Gameboy), el Commodore 64 y el Amiga 500 (Commodore rules!), el rebobinador de cintas de video (pa que no se cascaran los cabezales), el MSX (o como jugar al futbol con 22 tipos con bigote y pinta de fontanero), la doble pletina como pirateadora de juegos de ordenador (esas largas esperas para que se cargara el jueguecito de marras, ese atornillar y desatornillar el cabezal buscando el punto de carga correcto), el Amstrad CPC (ese Batman de Ocean que utilizaba la técnica filmation creada por Ultimate)…