Conocí de esta autora por el blog, inactivo desde hace ya casi un año, de Francisco G. Yayo. Me picó la curiosidad el poema que reproducía y decidí regalarme sus últimas dos obras: Napalm. Cortometraje poético, ganador del XVI Premio de poesía Hiperión, y Apátrida, ganador del VIII Premio de Arte Joven de poesía de la Comunidad de Madrid.
Son dos poemarios cortos, ninguno de los dos llega a las 100 páginas, que se leen en un suspiro y te dejan un excelente sabor de boca. No me considero con bagaje suficiente como para hacer una reseña en profundidad de los textos, me faltan referentes y aunque es un género al que me gusta acudir de vez en cuando, apenas ocupa una estantería de las pequeñas en mi biblioteca. Solo diré que el mundo lírico de Ariadna me atrapó y, tal vez sea por compartir entorno generacional, conecté con sus versos de inmediato. Los textos de Ariadna son poemas que nos hablan de seres humanos encerrados en su entorno urbano; podrían ser letras de canciones, elegantes, y deliciosamente bien tejidas, de esas que cada vez son más caras de descubrir. Sus frases no esconden metáforas incomprensibles ni giros gratuitos con que lucir palmito: son renglones que nos hablan de tú a tú, encontrando las palabras idóneas para decirnos cómo nos sentimos y expresar aquello que nunca supimos cómo decir. De perderse en sus páginas, ningún lector de prosa volvería a decir aquello de «la poesía no es para mí». Y como muestra algunos botones:
Saltamos de la cama
con la resignación de quien conoce
el día que le espera
metida en el bolsillo
del pijama. (…)
(Napalm. Página 25)
Mi ilusión por los cambios
tiene menos textura
que un flan de gelatina
y por eso la guardo en mi pequeña
maleta-frigorífico. (…)
(Napalm. Página 49)
No hay mayor impotencia
que compartir contigo un mismo tiempo,
la luz el aire… Todo
menos un mismo espacio.
(Apátrida. Página 37)
A oscuras, en el cuarto
dormían sobre duras colchonetas
todos los niños; todos,
excepto yo.
Sentada con la espalda en la pared,
las piernas recogidas contra el cuerpo,
no apartaba la vista
de un agujero blanco en la persiana;
del ojo que aguardaba a que durmiera
para robarme sueños y memoria.
(Apátrida. Página 75)
L’últim m’ha agradat molt. I dels altres, encara més curts, solament el primer. Però me l’apunte, el nom. El premi Hiperión em sembla que té molt de prestigi, no?
Salutacions afectuoses, 🙂
Me gustan más los «apátrida» que los «napalm». Pero de todos destacaría la claridad de sus versos y su fuerza.Me ha gustado. 8)
Crec que sí, Maria, és un premi molt a tenir en compte.
Pensa que els dos primers només són fragments. Estic segur que de llegir-los sencers t’agradarien molt més. 😉
Cuida’t.
Coincido contigo, Joe. No hay nada más triste que un ápatrida a causa del napalm y no de una decisición propia. Sabía que te gustarían. 😀
Habrá que investigar a la autora (en el sentido literario, que como ahora en España están investigando a todo el mundo…). Leer poesía de vez en cuando es la mejor y más barata medicina que existe.
Me ha encantado, como a todos; apunto el nombre. Y sí, en general Hiperión es garantía de cosas buenas, aunque es un pelín difícil encontrar sus libros en las librerías, sobre todo las colecciones de narrativa…
Un saludo!
Me alegra mucho que os guste.
Cierto JM, a veces logra reconfortar el espíritu y llenar de calidez como un buen oporto.
Siempre hay la opción de comprarlos on line, Mariko. Pinchando en los títulos de la entrada accedes a una librería virtual que los tiene disponibles.
Admiro tanto a aquellos que pueden y saben con tanto talento, expresar y comunicar con palabras lo que el alma les dicta y a veces les susurra.
Que maravilla de poemas! De verdad, de lo mejor que he leído en mucho tiempo.
Gracias por compartirlos Enric!
Un placer que lo hayas disfrutado, Verónica. El mundo de esta creadora merece mucho la pena.
Gracias, Enric, por tus amables palabras. Encontré tu blog de casualidad en el instituto en el que trabajo, y me quedé con ganas de escribirte. No sabes que alegría me dieron tus comentarios acerca de mis libros ;).
Y a todos los demás, gracias por el interés. Espero no defraudaros 😕
Un beso a todos.
Un verdadero placer tenerte por aquí, Ariadna. Como ves tus versos convencen sin necesidad de fuegos artificiales, simplemente por haber sido creados tal y como son. Gracias a ti por haberlos escrito. Quedamos a la espera de los que están por venir.
Un saludo.