José Miguel Vilar, autor de Los Navegantes, le ha dedicado unas líneas a Friki. Todos aquellos insensatos que todavía no conocen su ópera prima y quieran hacerse una idea de cómo las gasta el teclado de José Miguel, no tienen más que descargarse sin pagar un céntimo su novela breve Después del orgasmo.
Friki, la nueva novela para chavales de Enric Herce Escarrá, me ha removido cierto recuerdo: el día en que un informático (agárrate) me llamó friqui cuando le dije que me gustaba leer. Tremendo. Pero vuelvo a la novela y digo que espero que caiga en manos de muchos niños, porque es de las que inventan lectores, y premian la imaginación, y muestran qué grande que es contar historias o que te las cuenten. Al fin y al cabo, el prota salva la tierra sólo con su gracia para hilar historietas. Larga vida a este libro y a sus personajes. Y que la chavalería lo lea, y a ver si inventamos a los futuros lectores y escritores.
Por otro lado, aprovecho la ocasión para recomendar «Secuencia» de J.E. Álamo, relato que ha merecido el primer accésit del II Premio de las Editoriales Electrónicas, y en el que se puede apreciar a la perfección la capacidad que tiene Joe para captar como nadie cuanto rodea a esos microcosmos que son los bares y para introducir el elemento fantástico en su peculiar cotidianidad. Podéis leerlo aquí: Secuencia.